Cuándo empieza a notarse la barriga en el embarazo – Lo que puedes esperar
Si estás embarazada, una de las primeras cosas que te preguntarás es: “¿Cuándo empezará a notarse mi barriga en el embarzo?”.
Traer un bebé a este mundo provocará cambios drásticos en tu cuerpo, muchos de los cuales pasan desapercibidos: tus pechos se vuelven hipersensibles, tu útero se agranda y tus hormonas empiezan a desbocarse. Y luego experimentarás síntomas como ardor de estómago, náuseas y fatiga, todo ello parte del gran milagro de la reproducción humana.
Pero para muchas mujeres embarazadas, el cambio más profundo que experimentan es su aspecto. De repente, el embarazo se hace realidad cuando notamos por primera vez la formación de nuestra barriga. Así que, tanto si estamos emocionadas por mostrar nuestra joroba al mundo como si nos sentimos aprensivas por los cambios que sufre nuestro cuerpo, todas esperamos con ansiedad la aparición de los primeros signos del embarazo.
Para muchas mujeres embarazadas, sobre todo las primerizas, la espera de las señales visuales de que una nueva forma de vida se está gestando en el vientre puede ser una causa importante de estrés. Y comparar la propia barriga con la de otras mujeres que se encuentran en una fase similar del viaje puede llevar a un estado de pánico absoluto.
La verdad es que todas las mujeres son diferentes; no hay dos embarazos iguales. El tiempo que tardas en mostrar tu barriga puede ser drásticamente diferente al de tu amiga por un montón de razones.
¿Cuándo puedo esperar que se manifieste mi embarazo?
Lamento ser portadora de malas noticias, pero no hay una respuesta definitiva a esta antigua pregunta: depende de tus características físicas y de tus circunstancias personales.
Sin embargo, los datos del pasado nos han enseñado que las futuras mamás suelen desarrollar una barriga notable entre las semanas 12 y 16 de embarazo, ya que el útero no tiene tiempo de salir de la pelvis hasta entonces. La gran mayoría de barrigas en los embarazos comienzan a notarse durante el segundo trimestre.
No obstante, algunas madres muestran los signos reveladores de un embarazo al final del primer trimestre. Otras, sin embargo, no muestran una barriga hasta bien entrado el tercer trimestre. El abanico de posibilidades es amplio y, dependiendo de varios factores, puedes situarte en cualquiera de los dos extremos del espectro.
¿Qué factores determinan el momento en que empiezan a aparecer los signos del embarazo?
¿Qué factores determinan el momento en que el embarazo empieza a manifestarse? ¿Y puedes sopesarlos para tener una idea clara de lo que está por venir?
Hay diez factores diferentes que influyen en el momento en que empieza a notarse la barriga en el embarazo, y puedes tenerlos en cuenta para hacerte una idea aproximada de cuándo podrías notar por primera vez esa preciosa barriguita. Pero no te apresures a comprar ese vestido premamá porque no saber cuándo empezarás a mostrar la barriga es una situación demasiado común.
Examinemos los factores variables uno por uno para que te hagas una idea de lo que puedes esperar.
Altura
Las mujeres más altas tienen una sección media más larga, lo que hace que el peso del embarazo se distribuya en una zona más amplia y oculte la barriga del bebé. En otras palabras, tienen más espacio para crecer.
En consecuencia, las mujeres más altas tienden a presentar los signos visibles del embarazo más tarde que las mujeres más bajas. Por el contrario, las mujeres más bajas tienen menos espacio en la zona abdominal, lo que significa que su útero empezará a sobresalir antes.
Peso
El peso tiene un efecto profundo en el momento en que se empieza a notar, ya que las mujeres con más curvas se quedan embarazadas mucho más tarde. Pero en lugar de fijarse específicamente en el peso, el Índice de Masa Corporal (IMC) es una medida más útil.
Las mujeres con un IMC igual o inferior a 24 empezarán a mostrar los signos físicos del embarazo antes, porque tienen muy poca grasa corporal para ocultar el bulto.
Por otro lado, las mujeres con un IMC de 24 a 29 tardarán más en parecer embarazadas. Y las mujeres obesas, clasificadas con un IMC de 30 o más, parecerán embarazadas incluso más tarde porque tendrán un exceso de masa corporal para ocultar la creciente barriga del bebé.
Músculos abdominales
¿Has visto alguna vez a esas mamás fanáticas del fitness en las redes sociales con una barriga apenas perceptible a pesar de estar bien entrado el tercer trimestre?
La razón de este extraño fenómeno es que los músculos abdominales bien tonificados y tensos mantienen al bebé en crecimiento más cerca del torso, lo que impide que el bulto sobresalga. Esencialmente, un six-pack sirve para levantar el útero en expansión proporcionando un soporte muscular adicional.
Si no te has pasado la vida haciendo interminables abdominales en el gimnasio, tus músculos abdominales menos desarrollados no mantendrán el útero en su sitio y tu barriga sobresaldrá antes.
Diástasis de rectos
Otra forma en que tu abdomen puede influir en tu barriga es a través de la diástasis de rectos, que se refiere a la separación de tus músculos abdominales. El útero empuja los músculos abdominales durante el embarazo, lo que hace que se separen dos bandas musculares que antes se unían en el centro.
Cuando los músculos se separan finalmente, aparece naturalmente un abultamiento notable. La diástasis de rectos es más frecuente en mujeres mayores de 35 años, en mujeres que han estado embarazadas anteriormente y en mujeres que han dado a luz a bebés grandes o a varios bebés a la vez.
Número de embarazos anteriores
Las mujeres en su primer embarazo tardan más en manifestarse.
Sin embargo, después de dos o más embarazos, las mujeres tienden a empezar a mostrar hasta un mes antes que la primera vez. Los músculos uterinos de una madre experimentada ya se han estirado y han crecido para adaptarse a los embarazos anteriores, por lo que es más probable que su vientre sobresalga antes que el de una madre primeriza. El útero se sitúa más adelante en el abdomen, lo que hace que sea más visible.
La posición del útero
Independientemente de si has estado embarazada antes, la posición natural de reposo de tu útero puede influir en el momento en que empieces a dar a luz.
Algunas mujeres tienen el útero en retroversión, que se inclina hacia la columna vertebral y hace que el bulto del bebé sea más difícil de ver. Otras, en cambio, tienen un útero en anteversión que se inclina hacia delante, alejándose de la columna vertebral, lo que hace que el bulto sea más perceptible.
¿Quieres saber si estás en retroversión o en anteversión? Pide a tu obstetra que te haga una ecografía o un examen pélvico.
Número de bebés en el útero
Las mujeres embarazadas de gemelos o mellizos empezarán a notar su presencia mucho antes que el resto, normalmente en el primer trimestre. Y eso tiene mucho sentido porque hay dos (o más) bebés y una gran cantidad de fluidos y placenta adicionales.
Las madres de gemelos suelen empezar a dar a luz varios meses antes que los embarazos de un solo hijo, mientras que los múltiples lo hacen incluso antes.
Tus genes
La genética influye en el tiempo que tarda en aparecer la barriga del bebé. Si tu madre tardó en mostrarlo, lo más probable es que tú también lo hagas. También entran en juego otros factores, como la talla, el tono de la piel y la composición genética.
Hinchazón
¿Has notado alguna vez que tiendes a tirarte pedos y eructar con más frecuencia a medida que avanza el embarazo? Pues bien, esto se debe a que el peso y la presión añadidos del bebé impiden que otras funciones corporales rindan al máximo, incluida la digestión. Y esta reducción de la capacidad digestiva hace que los gases se acumulen durante más tiempo y sean más difíciles de expulsar.
Esta acumulación de gases se conoce comúnmente como hinchazón y ampliará tu barriga a medida que avance tu embarazo. Cada mujer experimenta la hinchazón a un ritmo diferente, por lo que este factor en particular es un poco difícil de predecir.
Fecha de parto imprecisa
Una de las razones por las que la barriga del bebé empieza a aparecer más rápido o más lento de lo esperado puede ser que la fecha de parto original no sea la correcta. Los obstetras suelen dar una fecha de parto imprecisa en las primeras etapas porque en ese momento disponen de menos herramientas.
Pero a medida que avanza el embarazo, las ecografías y otras técnicas les permiten predecir mejor la fecha real de parto.
¿Todos los bebés tienen el mismo aspecto?
Claramente no es así.
Las mujeres más grandes con una gran proporción de peso en la zona de la cintura suelen desarrollar una barriga en forma de B en lugar de la barriga estándar en forma de D. Sin embargo, esto no tiene por qué ser motivo de preocupación, ya que es totalmente natural que las mujeres de talla grande tengan una barriga en forma de B durante el embarazo. La mayoría de estas barrigas en forma de B acaban evolucionando hacia la forma de D en algún momento del tercer trimestre.
Si te preocupa el tamaño o la forma de tu barriga, consúltalo con tu obstetra en tu próxima revisión de maternidad. Y no te estreses comparando tu cuerpo de embarazada con el de otras, especialmente con el de esas mamás sobrehumanas de Instagram. Todas las mujeres se desarrollan de forma diferente, y no hay nada antinatural en tu aspecto.
Predecir cuándo empezará a notarse la barriga en el embarazo
La mayoría de las mamás embarazadas comienzan a mostrar barriga o tripa en el segundo trimestre, normalmente en algún momento entre las semanas 12 y 16. Sin embargo, hay una amplia gama de factores que puedes utilizar para hacerte una idea aproximada de cuándo empezará a aparecer tu barriga.
Recuerda que cada persona se desarrolla de forma diferente y que el hecho de que aparezca antes o después de lo esperado no significa que haya algo malo en tu bebé. Pide consejo a tu obstetra como lo harías normalmente y disfruta de la emocionante montaña rusa que supone la creación de una nueva vida.
Pediatra desde 2015, enamorada de mi trabajo. Tengo dos enormes renacuajos y un marido que cocina mejor que nadie.
Máster en Investigación Clínica y Postgrado en Divulgación Científica, también colaboro desde hace años como profesora en varios centros educativos y artículos científicos.
Empecé Revista del Bebé para ayudar a todas las madres y padres que lo pudieran necesitar, y así unifico mis grandes pasiones: los niños y escribir.