Pérdida de cabello en el bebé: una guía para los nuevos padres
Los primeros meses de la vida de un bebé están llenos de cambios y desafíos, tanto esperados como inesperados, mientras dan valientemente sus primeros pasitos en un mundo nuevo. Como padre primerizo, puede que te hayas preparado para cualquier eventualidad, pero hay algunas cosas que muchos padres nunca esperan: como la caída del pelo del bebé.
¿Recuerdas cuando viste por primera vez a tu pequeño y pensaste con orgullo que podría rivalizar con Chewbacca en el apartado de pelo? Sí, algunos bebés salen con una gran cantidad de pelo, pero no es anormal ni un signo de problemas que lo pierdan rápidamente.
¿Qué es la caída del pelo en los bebés?
Es posible que notes que el pelo de tu bebé se cae mucho más de lo normal. Puede haber mechones de pelo por toda la almohada, el cepillo y el agua de la bañera de tu bebé. Puede haber o no una calva en forma de banda, pero el pelo de tu bebé puede parecer notablemente más fino, sobre todo en la espalda.
Los médicos llaman a esta afección Alopecia Occipital Neonatal (NOA). La NOA es la forma más común de pérdida de cabello en los recién nacidos. Aunque es preocupante pensar que tu bebé puede quedarse calvo antes que tú, los expertos coinciden en que la caída del cabello durante los primeros 6 meses de vida es completamente normal y rara vez está causada por un problema médico.
El momento y el patrón de caída del cabello pueden variar en función del sexo, la etnia, la herencia y la alimentación. Por término medio, los bebés empiezan a perder el pelo en la octava semana y suele desaparecer en su mayor parte en la duodécima semana.
Pero no te preocupes; todo esto es temporal. Tu bebé es más resistente de lo que crees. Es probable que le broten nuevos pelos permanentes en poco tiempo, normalmente antes del séptimo mes, aunque pueden pasar hasta dos años para que el pelo madure y se engrose. Pero ten en cuenta que los cabellos maduros que crecen pueden no parecerse en nada al cabello de tu bebé al nacer. El pelo rizado puede volver a crecer liso, y viceversa. El pelo rubio puede dar paso al castaño, y el pelo escaso puede volver a crecer más grueso.
¿Qué aspecto tiene la caída anormal del cabello del bebé?
Si a los 6 meses tu bebé sigue perdiendo pelo o no muestra signos de que le vuelva a crecer antes de cumplir el primer año, te recomendamos que le transmitas tu preocupación a tu pediatra. Otros signos importantes que indican que la caída del cabello de tu bebé es anormal y puede justificar una visita al médico:
- La caída del cabello es repentina y grave
- El pelo sale a puñados
- El cuero cabelludo está rojo, escamoso e inflamado
- Tu bebé está perezoso o irritable
- Su bebé no gana peso o tiene problemas para alimentarse
¿Es común la caída del cabello en los bebés?
En realidad, no hay estadísticas sólidas ni fiables sobre la caída del cabello. Algunos estudios afirman que entre el 9 y el 12% de los recién nacidos experimentan pérdida de cabello, pero es probable que se trate de una subestimación. Como algunos bebés experimentan una pérdida de cabello muy leve que se resuelve por sí sola, los padres tienden a olvidarse de ella. Algunos padres ni siquiera se dan cuenta de que su bebé está perdiendo pelo, lo cual es totalmente comprensible. Sin embargo, esto puede dar lugar a que no se denuncien todos los casos, por lo que aún no se sabe realmente lo común que es esta afección.
¿Por qué pierden el pelo los bebés?
Se ha especulado mucho sobre la razón por la que algunos bebés pierden parte del pelo de nacimiento. Durante mucho tiempo, se ha señalado como culpable a la fricción de la cabeza con la almohada cuando se acuestan demasiado sobre la espalda. Lo más probable es que también hayas leído sobre esto en tus blogs de madres. Pero las investigaciones más recientes sugieren una razón más fisiológica que anormal.
A los bebés les empiezan a crecer los folículos pilosos de la parte delantera a la trasera del cuero cabelludo en la 12ª semana de vida del feto. En la semana 20, ya han formado todos los folículos pilosos. A las 22 semanas, el pelo del cuero cabelludo se desprende de forma sincronizada (telógena) siguiendo el patrón en el que se formó.
El proceso de caída se repite 12 semanas antes del parto. Cuando nace el bebé, la mayoría de los folículos pilosos de la parte delantera han terminado de desprenderse y ya están creciendo activamente (anágeno). En algunos bebés, el pelo de la espalda no entra en el proceso de muda hasta unas semanas después del nacimiento.
Así que cuando veas mechones de pelo en la almohada de tu bebé unas semanas después del nacimiento, no te asustes; lo que estás viendo es parte del ciclo natural del pelo. El hecho de que tu bebé duerma de espaldas puede parecer el problema de fondo, pero la fricción entre el cuero cabelludo y la almohada sólo favorece la caída del pelo, no la provoca.
Algunos expertos también creen que los grandes cambios hormonales que se producen tras el parto pueden hacer que los folículos pilosos del bebé entren en la fase de caída antes de tiempo. Esta afección, denominada efluvio telógeno, puede aparecer unas semanas después de acontecimientos estresantes y traumáticos como una enfermedad grave o el parto.
El efluvio telógeno suele estar causado por un aumento del cortisol durante el parto. Esta hormona desvía la mayor parte de los recursos del cuerpo hacia funciones vitales esenciales para la supervivencia, y los aleja de funciones no esenciales como el crecimiento del cabello.
Otra teoría es que un descenso brusco de la progesterona (sí, la misma hormona que te da un pelo digno de Vogue y que puede hacer que Gisele se quede sin blanca) después del parto puede desencadenar el efluvio telógeno tanto en ti como en tu bebé.
¿Hay bebés más propensos a perder el pelo?
Algunos estudios han descubierto que el NOA es más común en los bebés de raza blanca, nacidos de madres menores de 34 años, con parto vaginal y/o nacidos a término.
Afecciones médicas que pueden provocar la caída del cabello del bebé
Si a tu bebé no le vuelve a crecer el pelo o sigue perdiéndolo al cumplir el primer año de vida, podría haber una razón más grave detrás de la caída del cabello.
Alopecia Areata
La alopecia areata es una enfermedad autoinmune crónica en la que el sistema inmunitario ataca al cabello sano. Hace que el bebé pierda pelo en las primeras fases. Las manchas son suaves y normalmente redondas u ovaladas, pero pueden adoptar muchas formas. A la mayoría de los niños les vuelve a crecer el pelo en un año, pero algunos desarrollan alopecia areata en todo el cuero cabelludo. Alrededor del 50% de los niños sufrirán brotes de caída del cabello en el futuro. Aunque la enfermedad puede afectar a personas de todas las edades, rara vez afecta a los niños menores de 6 meses.
La tiña
Si tu hijo desarrolla parches de picor y escamación con pérdida de cabello, lo más probable es que se trate de tiña. La tiña, también llamada tinea capitis, no es en realidad un gusano. Se trata de una infección fúngica del cuero cabelludo y es una de las causas más comunes de pérdida de cabello en los niños, sobre todo en los afroamericanos. Aunque rara vez afecta a niños menores de 2 años, es muy contagiosa. No es raro que varios miembros de la familia que comparten ropa, peines, almohadas y sombreros se infecten de tiña.
Costra láctea
¿Tu bebé tiene manchas amarillas gruesas, costrosas y aceitosas en el cuero cabelludo? Podría tratarse de una costra láctea, una forma de eczema llamada dermatitis seborreica. A diferencia de la tiña, la costra láctea no es dolorosa, ni pica, ni es contagiosa. Afecta al 10% de los bebés de entre 3 semanas y 12 meses. Los casos leves desaparecen en semanas o meses con cuidados caseros diligentes. Provocada por las hormonas que pasan de la madre al bebé antes del nacimiento, la costra láctea hace que las glándulas sebáceas del bebé produzcan demasiada grasa.
Tratamientos médicos para la caída del cabello del bebé
No tienes que arrancarte el pelo por la calvicie de tu bebé. En los bebés de menos de seis meses con NOA, lo único que puedes hacer es sentarte, esperar a que pase y aceptarlo como una parte natural del crecimiento.
En el resto de circunstancias, el pediatra de tu bebé puede remitirte a un dermatólogo que realizará pruebas de diagnóstico para llegar al fondo del problema. Es posible que el médico te haga algunas preguntas para facilitar el proceso de diagnóstico. Una vez que el dermatólogo sepa cuál es el problema, elaborará un plan de tratamiento para que lo pruebes con tu bebé, dependiendo de la gravedad del problema subyacente y de la edad de tu bebé.
Alopecia Areata
Aunque la alopecia areata no tiene cura, la aplicación de cremas con esteroides en el cuero cabelludo del bebé puede ayudar a controlar la enfermedad. Dependiendo de la edad de su hijo, el dermatólogo puede permitir el uso de estimuladores del crecimiento del cabello, como el minoxidil y la antralina, además de los esteroides.
Tiña
La infección por tiña del cuero cabelludo requiere un tratamiento de 6 a 8 semanas con un antifúngico oral llamado griseofulvina. El médico también puede aconsejarle que lave el cuero cabelludo de su bebé con un champú antimicótico que contenga selenio o ketoconazol y lo deje actuar durante 5 minutos. Aunque el champú medicado no mata el hongo, puede evitar que se extienda.
Como la tiña es muy contagiosa, los demás niños de la casa deben tratarse simultáneamente con el champú medicado, y abstenerse de compartir prendas de vestir, cepillos de pelo y almohadas. Los animales de la casa podrían ser una fuente de reinfección, por lo que un veterinario cualificado debe tratarlos como corresponde.
Costra láctea
Si tu bebé tiene costra láctea, el tratamiento es opcional porque suele resolverse por sí solo. Mientras tanto, debes lavar el cuero cabelludo de tu bebé con champú para bebés a diario. Algunos médicos recomiendan alternar el champú para bebés con un champú anticaspa como Head & Shoulders. Si el champú diario no funciona, el médico de tu bebé puede recomendarte una crema de hidrocortisona al 1% o un champú antimicótico que puedes comprar sin receta.
Cómo prevenir la caída del cabello del bebé
Pasar por la consulta del médico y recibir un diagnóstico definitivo es sólo la mitad de la batalla. La mayor parte de la batalla tiene lugar en casa, por lo que todos los padres deben tener un plan de acción a prueba de errores en su arsenal.
He aquí algunos consejos útiles que hay que tener en cuenta para evitar que se produzca la caída del cabello del bebé en primer lugar y para permitir que el pelo vuelva a crecer después del diagnóstico.
No les laves el pelo a diario
Los bebés normalmente producen poca grasa en su cuero cabelludo. Además, no se ensucian con tanta frecuencia como para necesitar un lavado diario. Utilizar champús a diario puede estropear la grasa natural del cabello de tu bebé, haciendo que el pelo se vuelva más seco, quebradizo y propenso a romperse. Así que, a menos que tu bebé tenga una infección en el cuero cabelludo, limita los lavados a 2 ó 3 veces por semana con un champú para bebés suave y sin perfume. O mejor aún, utiliza sólo agua tibia.
No le estilices el pelo
¿Sabías que el peinado puede dañar el cabello? Estilizar el pelo de tu bebé en coletas o trenzas puede quedar muy bien, pero también puede acelerar su caída. El cabello del bebé es fino y sensible; el peinado aumenta la tensión del cuero cabelludo, reduciendo el flujo sanguíneo que transporta el oxígeno y los nutrientes para nutrir el cuero cabelludo y el cabello del bebé.
No te metas en su cuero cabelludo
Sabemos bien lo satisfactorio que puede ser hurgar en las costras y reventar los granos, pero cuando se trata de la costra láctea de tu bebé, hay una forma mejor y más segura de deshacerse de las costras. En lugar de picar y tirar, aplica aceite mineral o de coco sobre las costras durante 15 o 30 minutos antes del baño. El aceite ablandará las costras, facilitando su eliminación. Cuando llegue la hora del baño, masajea el cuero cabelludo del bebé o utiliza un cepillo de cerdas suaves para eliminar las costras reblandecidas. Asegúrate de eliminar todo el aceite porque puede empeorar la costra láctea de tu bebé si se deja en el cuero cabelludo.
Reflexiones finales
Si tu bebé presenta otros síntomas como enrojecimiento, inflamación y formación de costras, pide una cita con su médico. Cualquiera que sea la causa de estos síntomas puede tratarse o controlarse con los medicamentos adecuados y el cuidado apropiado del cabello.
Pero, para la mayoría de los bebés, la pérdida de cabello no es un signo de ningún problema. Algunos bebés pierden pelo en los primeros meses de vida, y eso es completamente normal, así que no hay necesidad de asustarse e ir corriendo al pediatra de tu bebé.
Pediatra desde 2015, enamorada de mi trabajo. Tengo dos enormes renacuajos y un marido que cocina mejor que nadie.
Máster en Investigación Clínica y Postgrado en Divulgación Científica, también colaboro desde hace años como profesora en varios centros educativos y artículos científicos.
Empecé Revista del Bebé para ayudar a todas las madres y padres que lo pudieran necesitar, y así unifico mis grandes pasiones: los niños y escribir.